Trabajo de cuestas, buen entrenamiento de fuerza para sustituir una sesión de gimnasio.
Después de un día duro en el trabajo necesitas que te de el aire.
Así que decides no ir al gimnasio para hacer tu rutina de piernas para trabajar estas con trabajo de cuestas.
No hay nada mejor que meter cuestas cortas (10-30m) con gran pendiente.
Ahora a por lo difícil, hay que subir estas cuestas a un ritmo rápido de forma explosiva, notarás en seguida como tus piernas se tensan para poder subir esa pendiente. Si trabajas por frecuencia cardiaca, probablemente no llegues a pulsaciones altas en tan corto periodo de tiempo, en estos casos, es más recomendable trabajar con Stryd y por potencia.
La bajada es para recuperar, así que tómatelo con calma y baja tranquilamente andando. Incluso hay veces que tras bajar la cuesta se puede alargar la recuperación con algo más de tiempo. Los trabajos máximos y muy explosivos necesitan recuperaciones completas para poder beneficiarse del entrenamiento.
Notarás como tu cadena posterior (glúteos e isquios) se tensan con cada zancada para lanzarte hacia arriba en la cuesta.
Importante meter un buen calentamiento previo, ya que si vas a meter un trabajo explosivo nuestra musculatura tiene que estar bien preparada.
Incluso si este trabajo lo quieres hacer más intenso podemos meter algún ejercicio de fuerza previo antes de comenzar la cuesta. Meter sentadillas, algún ejercicio de multisaltos, son buenas variantes que harán subir la intensidad del entrenamiento.
Ya sabes, si quieres trabajar tu tren inferior en la carrera, unas cuestas cortas y explosivas te irán muy bien.
Todo esto al terminar hará que ni te acuerdes de ese entrenamiento que tenías programado para el gimnasio, eso sí, no abuses de estos cambios, hay que seguir metiendo fuerza en el gimnasio, así que sustituye estas sesiones en contadas ocasiones.
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